ESTUDIANTES 0 - 1 BANFIELD
Estudiantes, que ya venía en picada, ahora se estrelló
Jugó realmente mal y dilapidó la chance de quedar puntero solo
Por ANÍBAL GUIDI

Si bien estaba claro ayer en el Estadio Ciudad de La Plata, por la manera en que se manejaban los protagonistas, que aquel que hiciera el gol ganaba, lo cierto es que el equipo albirrojo fue una fuerza inexpresiva, con una carencia absoluta y sorprendente para elaborar juego, y ni hablar de generar situaciones de gol, casi inexistentes en los 90 minutos de juego.
Si con los titulares el equipo había transitado por una medianía muy marcada, con los cinco cambios que introdujo el técnico Eduardo Berizzo no hizo más que plantar un equipo que deambuló por la cancha, que lució impreciso e inoperante, que no hizo más que generar desconcierto en su propia gente que, a esta altura no sabe a lo que juega el equipo y que, tras consumarse la derrota ante el Taladro, la exclamación de que "cueste lo que cueste, el sábado tenemos que ganar" retumbó en todo el estadio.
Banfield no le fue en zaga. Pero estuvo prolijo, se defendió bien y trató de contragolpear, claro que muy esporádicamente.

Todo esto porque, sencillamente, Estudiantes no fue un equipo ofensivo. No estuvo preciso en el manejo de la pelota, tampoco acertó en las jugadas con pelota detenida, algo que ya preocupa y mucho, y terminó resignándose a su suerte, sin rebelarse casi ante la adversidad.

Estudiantes estuvo mejor perfilado en el primer tiempo. Cuando Pereyra ganaba por la izquierda y los volantes empujaban con fuerza. Pero las chances que generó vía Pereyra primero, y luego Núñez y Verón, se las frustró un Bologna que respondió bien en esas tres ocasiones.
Y después, nada más. Lo suyo fue más de lo mismo. Pases fallidos, centros intrascendentes, muchos sin destino cierto, individualidades sorprendentemente declinantes, y poquísimo peso en el área de enfrente, fue lo que expuso el equipo de Berizzo que da la sensación que no encuentra la forma, ni la manera.
Que ha extraviado la brújula, a quien se le ha apagado ese fuego sagrado, que ya no presiona y ahoga como antes a los rivales y, por ende, equipos como Banfield ayer, se le animan y, con el simple argumento de defenderse bien le pueden hacer perder un partido que no estaba en los planes de nadie.
El cambio táctico que ensayó Berizzo, en la práctica, no dio resultado. Solo agregó confusión e hizo que la ténue línea que mantenía en pelea al equipo, se borrara totalmente. "Cuando se pierde, la responsabilidad es del entrenador", admitió ayer el técnico albirrojo, quien buscó quitarle esa presión a los jugadores en vísperas del derby de la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario