COMO EN SU MEJOR EPOCA Estudiantes jugó como en las mejores épocas. Toque, traslado y definición, bajo la batuta de Juan Sebastián Verón. Así, el equipo de Pachorra vuelve a creer en sí mismo y piensa en los dos frentes

Luego de varios partidos en donde no se había mostrado el mejor nivel, Estudiantes demostró ayer parte de aquel gran equipo que supo coronarse como el mejor del continente en julio del año pasado. Con destellos de calidad de Sebastián Verón y otra gran actuación de José Ernesto Sosa y Maximiliano Núñez, el equipo de Sabella dejó sin reacción al vigente subcampeón del fútbol argentino. Mauro Boselli, con todo su potencial goleador en los últimos metros, fue determinante para ampliar la diferencia en un momento clave del partido, cuando el equipo leproso insinuaba levantarse en la cancha de Quilmes. Esta vez, los cambios de Sabella le aportaron jerarquía al equipo, cuando el partido ingresaba en una etapa definitoria. Primero con Leandro Benítez y Gastón Fernández para tener la pelota y mantener el protagonismo. Y más tarde con Clemente Rodríguez, a los fines de mantener la verticalidad en la mitad de la cancha. Con la solvencia defensiva que lo caracterizó en la gesta continental del año pasado, el Pincha puede darse el lujo ahora de contar además con un arquero como Orión, que aparece en los momentos justos para mantener su arco en cero. La recuperación de Angeleri y la habilitación de la Gata le aportan el recambio justo y necesario para afrontar lo que se viene de la mejor manera y con las expectativas muy altas. Estudiantes, con nombres de peso y un juego vistoso, demostró que está para ser el gran protagonista en este primer semestre de 2010. Está en carrera por el torneo Clausura, pero mantiene vigente su deseo de volver a repetir una campaña exitosa en el plano internacional.