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La vida por una entrada

En cinco horas los hinchas arrasaron con las generales y plateas. Hubo algunos disturbios menores

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No quedó nada. Ni una entrada como para muestra. Los hinchas albirrojos, en pocos minutos, arrasaron literalmente ayer con las 4.500 localidades que se pusieron a la venta para el partido del próximo miércoles ante River Plate.

La gente de Estudiantes llegó en la noche de ayer desde Quilmes y directamente se instaló en las inmediaciones del estadio de 55 y 1 en espera que se habiliten las boleterías. Es que nadie se quiere perder este partido clave para las aspiraciones del equipo de Sabella, y no era cuestión de quedarse afuera.

Tanta era la expectativa y la gente reunida en la zona, que se resolvió habilitar antes las boleterías del estadio. Y así ocurrió. Abrieron cerca de las 10 cuando, en principio, se había fijado a las 11.

La venta fue rápida y, en cinco horas, volaron todas. Y cuando se anunció que se habían agotado, brotó la bronca en aquellos que no habían podido concretar su deseo de adquirir la preciada entrada, que se vendía a 40 pesos.

Lo mismo ocurrió con las mil plateas, a 120 pesos, que se agotaron dos horas horas después.

Si bien esos socios pincharratas hicieron escuchar a viva voz sus quejas y también produjeron algunos disturbios, lo cierto es que poco a poco entraron en razón al comprobar, por ejemplo, que la venta había sido normal y de acuerdo a los parámetros fijados de antemano por la CD del club.

Se fueron mascando rabia, es cierto, y con la única alternativa de mirarlo el miércoles por televisión.